Junta argentina
Las Madres de la Plaza de Mayo fueron un poderoso movimiento social en Argentina que luchó por los derechos humanos desde la dictadura de 1976-1983. Las mujeres judías desempeñaron un papel fundamental en este movimiento, exigiendo verdad y justicia para sus hijos y para todos los afectados por el gobierno militar, que desapareció, torturó y mató a unas 30.000 personas. Como madres judías, sus historias resuenan con las historias judías de violencia, migración y activismo, revelando las complejidades de establecer la pertenencia y la ciudadanía en las Américas.
Durante los años de profundo terror estatal en Argentina, las madres cuyos hijos fueron «desaparecidos» por el gobierno -secuestrados de forma clandestina, sin dejar rastro de su paradero- se reunieron en la plaza pública central para protestar. Las Madres de la Plaza de Mayo se convirtieron en un poderoso movimiento por la justicia y los derechos humanos, y muchas de esas mujeres eran judías.
En el punto álgido del terror estatal, cuando muchas temían que cualquier forma de disidencia las expondría a la desaparición o a la represión, las Madres empezaron a exigir saber qué había pasado con sus hijos desaparecidos y que los devolvieran vivos. Hicieron su primera protesta pública en abril de 1977, situándose en la Plaza de Mayo, una plaza pública frente a la Casa Rosada (Palacio Presidencial) que simboliza el corazón de Argentina. Llevaban sencillos pañuelos blancos cosidos con los nombres de sus hijos y la fecha de su desaparición. Muchas sostenían también carteles con fotografías de sus hijos, negándose simbólicamente a dejarlos desaparecer. Al principio, el hecho de ser madres las protegía en cierto modo, ya que las autoridades las dejaban en paz. Muchas de ellas eran amas de casa sin experiencia política previa, a las que el gobierno tachaba de «locas». Sin embargo, tras llamar la atención internacional sobre los abusos de los derechos humanos en Argentina, las mujeres se convirtieron en objetivo de la represión. A pesar del terror generalizado en el que vivían, continuaron, volviendo a la Plaza todos los jueves, convirtiéndose en un poderoso movimiento social y en una de las únicas formas públicas visibles de protesta durante aquellos años de terror y miedo.
Madres de plaza de mayo
Raquel Rita Arditti nació en Buenos Aires, Argentina, el 9 de septiembre de 1934. Sus padres, judíos sefardíes -Jacques Arditti y Rosa Cordovero- emigraron por separado de Turquía a Argentina, donde se conocieron, se casaron y tuvieron tres hijas: Edith, Rita y Alicia. Durante la infancia de Rita se les unieron tres primos hermanos de Turquía y las 6 niñas, especialmente las 5 mayores, pasaban mucho tiempo juntas, visitando las casas de los demás y asistiendo al cine los fines de semana. Rita y su madre también solían ver películas juntas, sobre todo en francés.
Cuando Rita estaba terminando la escuela primaria, conoció a un chico que asistía al Colegio Ward de Buenos Aires, un colegio privado bilingüe (español-inglés) dirigido por metodistas que a Rita le pareció una muy buena escuela. El padre de Rita, que siempre apoyó la educación de Rita, aceptó que fuera. Incluso se alojó en el colegio durante la semana durante los tres primeros años. Como el dormitorio de las chicas estaba cerrado durante su último año, tuvo que desplazarse una hora y media en cada sentido. Le encantaba el colegio y hablaba con aprecio de la educación que recibió allí durante toda su vida. El plan de estudios de la escuela, junto con la competencia académica de Rita, la prepararon bien para los estudios universitarios.
Abuelas de la plaza de mayo
Bietti, Lucas M. «La construcción del yo moral en la memoria autobiográfica: Ser un «hombre común» dentro de la experiencia de la dictadura en Argentina». En Anuario de Ciencias Idiográficas, editado por S. Salvatore y otros, 253-76. Rom: Firera & Liuzzo, 2010.
Fried, G. «Armando memorias tras el terror de Estado y las políticas de olvido en Uruguay: el proyecto testimonial de las presas políticas (1997-2004)». Identidades Sociales: Journal for the Study of Race, Nation and Culture 12, no. 5 (2006): 543-562.
Kordon, D., Edelman, L. & equipo de asistencia psicológica de Madres de Plaza de Mayo. Por-venires de la memoria: efectos psicológicos multigeneracionales de la represión de la dictadura: hijos de desaparecidos. Buenos Aires: Ediciones Madres de Plaza de Mayo, 2007.
Navarro, Marysa. «Lo personal es político: Las Madres de Plaza de Mayo». En Poder y protesta popular: Latin American Social Movements, editado por Susan Eckstein. California: University of California Press, 1989.
La guerra sucia
El OLA junto con The New School ha tenido la suerte de participar y honrar el trabajo de la Asociación de las Abuelas de Plaza de Mayo. A través de la Universidad las Abuelas han recibido títulos honoríficos en vista de su importante lucha. El OLA ha organizado encuentros entre las dirigentes de la Asociación y los estudiantes, para que la historia y los relatos de las Abuelas se transmitan a las nuevas generaciones y se difundan por todo el mundo. El OLA espera desarrollar esta relación con las Abuelas para futuros eventos centrados en su trabajo en particular y en los desafíos de los derechos humanos en general en toda América Latina.
El 24 de marzo de 1976, las Fuerzas Armadas argentinas usurparon el gobierno constitucional en Argentina mediante un golpe militar. El régimen militar, autodenominado «Proceso de Reorganización Nacional», llevó a cabo una política de terror en todo el país. La «desaparición forzada» fue el método predominante para ejercer la represión política. Treinta mil personas fueron afectadas, de todas las edades y procedencias, privadas de su libertad y sometidas a confinamiento y tortura a manos del régimen militar. Entre los miles de mujeres secuestradas, cientos de ellas estaban embarazadas y dieron a luz en cautiverio. La mayoría de esas mujeres fueron asesinadas y sus bebés fueron secuestrados por el régimen militar.